Las estrategias de inversión más inteligentes no son necesariamente las más complejas y sofisticadas. Por el contrario, muchas veces las estrategias más sencillas son las que mejores resultados generan en el tiempo. En este sentido, promediar el costo de entrada es una herramienta simple y efectiva que puede ayudarnos a comprar posiciones a precios de entrada convenientes.

¿Qué significa promediar el costo de entrada?

Básicamente, la estrategia implica comprar una cantidad fija de dinero en un activo en base a un esquema regular de tiempo, sin importar el precio de mercado en el momento. De esta forma, el inversor compra mayor cantidad de acciones cuando los precios son más bajos, y viceversa.

La estrategia es muy habitual entre inversores de largo plazo que buscan una estrategia sensata y eficiente. Muchas veces, estos inversores suelen utilizar instrumentos como los ETFs para obtener diversificación a bajo costo, lo cual presenta la ventaja adicional de reducir considerablemente los riesgos de la inversión.

Por ejemplo, el Vanguard Total Stock Market ETF (VTI) es un ETF que brinda exposición a un amplio conjunto de compañías en los Estados Unidos de lo más diversas en cuanto a su tamaño y composición sectorial. El portafolio invierte en más de 1.2000 empresas y tiene un costo anual de gestión de 0,04%. Tanto en cuanto al grado de diversificación como en lo que respecta a la eficiencia de costos, este instrumento presenta características muy atractivas para el inversionista.

Por supuesto que el precio de mercado del ETF fluctúa permanentemente al compás de las oscilaciones del mercado en general. Sin embargo, cuando invertimos en un conjunto de 1.200 firmas con diferentes características, lo más probable es que el valor de mercado de estos negocios como conjunto tienda a incrementarse en el tiempo, más allá de las oscilaciones de precios a corto plazo.

Una estrategia inteligente y con un nivel de riesgo relativamente bajo en el mercado accionario consiste en seleccionar un vehículo como el Vanguard Total Stock Market ETF y comprar regularmente acciones promediando el costo de entrada. Un ejemplo típico es comprar un monto fijo de dinero todos los meses, sin prestar demasiada atención al precio de mercado en ese momento.

Por ejemplo, si vamos a comprar 1.000 dólares en acciones todos los meses, cuando el precio de mercado es de 100 dólares por acción, compraremos 10 acciones, y si el precio de mercado al mes siguiente es de 120, compraremos 8 unidades. Alternativamente, si el precio baja a 80 compraremos 12 acciones en el período. Queda claro entonces que a menor precio, mayor es la cantidad comprada y viceversa.

Ventajas y desventajas

Todas las estrategias tienen sus puntos fuertes y débiles, con resultados que pueden variar en función del contexto. En este caso, cuando el precio de mercado del activo sube rápidamente y sin pausa, entonces obtendremos un mejor precio de entrada comprando toda la posición lo antes posible que promediando el costo de entrada en el tiempo.

Por el contrario, si el precio va a tener una dirección cambiante y un elevado grado de volatilidad, entonces la estrategia de promediar los costos de entrada produce resultados muy superiores frente a comprar toda la posición desde un principio.

Lamentablemente, no podemos saber de antemano cómo será el comportamiento de precios en un activo. Sin embargo, queda claro que una estrategia de promediar los costos es de menor riesgo frente a la alternativa de comprar un 100% de la posición al principio.

Si el precio del activo sube rápidamente habremos obtenido menores ganancias, pero si el precio va a oscilar o incluso caer, podremos tener un precio de entrada más conveniente con una estrategia de promediar el costo. Esto significa que la estrategia reduce las ganancias en un escenario optimista y reduce las pérdidas en un escenario pesimista, lo cual implica entonces una reducción en los niveles de riesgo y volatilidad que afronta el portafolio.

Una estrategia simple y efectiva

En los mercados financieros, muchas veces lo ideal es enemigo de lo bueno. La mayoría de los inversores suelen cometer sus errores más costosos cuando intentan entrar en las posiciones en el mínimo ideal de precios en lugar de conformarse con un buen punto de entrada.

Por supuesto que todos quisiéramos comprar en el precio mínimo histórico, y si fuera posible también buscaríamos vender cuando el precio marca sus máximos absolutos. Sin embargo, la evidencia demuestra que no es posible operar consistentemente de esta manera, y pretender esta clase de resultados no es un enfoque realista.

Los mejores operadores no son quienes compran siempre en mínimos históricos; esta clase de operadores no existe en el mundo real. Por el contrario, quienes obtienen los mejores resultados son los operadores que reconocen las limitaciones que impone la realidad en los mercados financieros.

En lugar de buscar el punto de entrada ideal en una operación particular, los profesionales de mercado se enfocan en obtener buenos puntos de entrada consistentemente a lo largo del tiempo, ya que esta estrategia es la que suele generar retornos satisfactorios en el largo plazo.

Promediar el precio de entrada es un enfoque inteligente en ese sentido, ya que obviamente no estaremos comprando toda la posición en el menor precio posible, pero lo más probable es que estemos comprando mayor cantidad de acciones a precios relativamente bajos, lo cual es claramente positivo en términos de obtener un precio de compra conveniente.