Ya pasaron tres semanas de protestas en Costa Rica entre el gobierno y los sindicatos del sector público de Costa Rica por un proyecto de reforma fiscal y las partes parecen no llegar a un acuerdo. Este fin de semana aplazaron un encuentro para discutir un acuerdo preliminar para levantar el paro y, mientras la distancia entre los negociadores crece, la iglesia católica intenta mediar para resolver al crisis en este país centroamericano.
La cita debía celebrarse este domingo en horas de la tarde, pero se suspendió luego de que varias organizaciones sindicales rechazaron un acuerdo preliminar pactado por sus dirigentes con el gobierno. Un breve comunicado de la Conferencia Episcopal indicó que el encuentro se trasladaría para el lunes “